Descubre tu Trazo
El Taller Descubre tu Trazo es probablemente el taller que más veces he organizado. Más de 100 personas han pasado ya por este taller.
Empecé a realizarlo con la ayuda de mi maestro, enseguida él se retiró y dejó que yo fuese investigando y perfeccionando esta experiencia. Por ejemplo, decidí que era más cabal y liberador dejar el Kanji e investigar con el castellano o en inglés, su escritura, como medio de conectar con las personas ya que así estaban más cómodas y costaba menos romper las resistencias de la mente...de ahí pase a las tres maneras de conectar o más bien apartar la mente, que creía necesarias para realmente constatar, sin ninguna duda, lo asombroso y certero del trazo desde un estado de verdad y conexión.
Puedo afirmar que en este momento este taller se ha convertido en toda una experiencia para las personas interesadas en pintar así como aquellas que ni se plantean pintar, sino simplemente descubrir algo más que les conecte directa y sorprendentemente con lo de espiritual que hay en el arte, o si eres más amante de lo cartesiano, con las potencialidades latentes del ser humano.
Este taller acaba con el trazado de un Enso, o la epifanía Zen, un elemento extremadamente sencillo lleno de sofisticación que redondea, válgame la redundancia, los procesos del taller.
La experiencia de este taller tiene un gran efecto "wow" o de asombro que a veces me cuesta sostener cuando ya se empieza con la práctica continuada del Sumi-e donde la disciplina se convierte en una variable a veces difícil de sostener por las mentes del siglo XXI. Si que reconozco que estas mentes tan agitadas disfrutan mucho de los estados de quietud que logramos una vez que se liberan de la intención de querer hacerlo bien, pelea bastante habitual en los principios de esta práctica Zen. Aprovecho aquí para lanzarles a mis alumnos un guiños con la frase que tanto repito "No hay bien ni mal, tan sólo Qi en el trazo"
El sentido del humor y la simpatía también las considero fundamentales para llegar más rápidamente a unos estados de auto-observación y reconciliación con uno mismo. Elevan la energía en la persona y bajan las barreras del control haciendo más fácil la profundidad en la mirada.
En resumen,no os lo perdáis, toda una experiencia :-)